Stand 3B23. Con Espacio Líquido y La Gran
Del 21 al 24 de octubre de 2021; pabellón 3 de Ifema, Feria de Madrid. España
La Gran y Espacio Líquido comparten proyecto y stand en Estampa 2021.Con obras de Amparo Sard, Enrique Marty, Noemí Iglesias, Josep Tornero, María Acuyo y Job Sánchez
El proyecto reflexiona sobre cuestiones contemporáneas a través de medios históricos como la pintura y la porcelana. También conecta conceptos de interés actual como es la posibilidad de otros mundos desde perspectivas tan amplias como lo siniestro y lo doméstico. Desde la extraña familiaridad de acercarnos a cuarentenas presentes y futuras para abordar temáticas como el tiempo en la imagen y la afectividad tecnológica.
Amparo Sard (Mallorca, 1976). Los trabajos de la artista se centran en la lucha de elementos contrarios. El material puede ser frágil, pero los referentes utilizados en los dibujos pueden aportar un concepto que nada tiene que ver con la fragilidad. O por el contrario, algo que parece inocente, se presenta en dimensiones exorbitantes o monumentales que desbordan al espectador y la comprensión de éste. Esa tensión, de alguna manera, está siempre en su trabajo, tanto en papeles perforados, como esculturas de fibra de vidrio, pinturas en resina o en videos. Es una tensión que no solo está en los materiales, dimensiones e imágenes utilizadas, sino que también se extiende y afecta a los temas de su obra, que siempre hacen referencia a la contemporaneidad individual y social que vivimos.
La obra de Enrique Marty (Salamanca, 1969), a menudo controvertida por la potencia y frescura de su expresión o por los temas tratados, mezcla diferentes medios, como la escultura, la pintura y el video, para componer impactantes escenas. En ellas explora lo siniestro, esas situaciones en las que lo familiar nos resulta inquietantemente extraño. Sus protagonistas han abandonado la superficie vana del tópico para adentrarse en situaciones malditas, violentas y grotescas. En sus últimos trabajos, la técnica, el formato, los temas y el simbolismo pretenden crear una sensación de enigma, que hay que ver de cerca. Aunque nos enfrentamos a situaciones cuyos códigos implican narrativas, nos quedamos desorientados por la falta de algo coherente o sustancial a lo que aferrarnos.
Noemí Iglesias (Asturias, 1987) se define trabajando con medios escultóricos y formatos performativos de larga duración. Es un claro ejemplo de nomadismo contemporáneo: desde el año 2009 ha vivido y trabajado en Grecia, Inglaterra, Finlandia, Italia, Hungría, Taiwan y Portugal. Su trabajo representa la actual mercantilización del enamoramiento y cómo los patrones emocionales son asumidos socialmente como iconos de consumo en la producción de una utopía romántica. En ella, las experiencias sentimentales se presentan a través de productos fabricados por industrias específicas que transforman las pautas emocionales en estrategias consumistas.
Partiendo de un trabajo previo de búsqueda y archivo, Josep Tornero (Manises, Valencia, 1973) realiza instalaciones pictóricas a modo de collage, buscando correspondencias entre imágenes en apariencia inconexas que permitan construir una historia. El extraordinario uso del blanco y negro y los efectos pictóricos de arrastre vienen a resaltar la crudeza de la luz mortecina de la que emergen, como fantasmas del pasado, imágenes de rostros carcomidos por el miedo, de bustos grecolatinos y de otras figuras grotescas que intentan remover la conciencia del espectador y que este no quede impasible.
La obra de Maria Acuyo (Granada, 1972) trata la pintura como una proyección de algo más primitivo, revelando lo orgánico como antesala para entender lo esencial y lo oculto, dotando a la materia de un estado más reflexivo. En su obra hay una marcada influencia de la microbiología y las estructuras anatómicas de los seres vivos –debido principalmente a su formación científica– y con ella busca construir una realidad fictia que cubra las formas con sutiles velos narrativos, creando imágenes ambiguas. Un microcosmos de elementos contradictorios que se escapan del subconsciente seduciendo al observador por su extrañeza.
Job Sánchez (La Coruña, 1979) explora las prácticas artísticas en el espacio doméstico por medio de collages, pinturas, pequeñas esculturas y obras digitales. Investiga sobre las posibilidades de lo plástico como lenguaje, utilizando el mínimo de recursos y en constante diálogo con la historia del arte. La geometría, los sistemas de representación y el reciclaje visual también son cuestiones que le interesan especialmente.
Enrique Marty, “Animalmineralvegetal Man 6” (Nazi plant), 2020. Técnica mixta (resina y esmalte). 12 cm de altura.
Josep Tornero, “The Wall”, 2021. Óleo sobre lino, 170×195 cm
María Acuyo. Sin título, 2021. Acrílico sobre lienzo, 150 x 150 cm
Noemí Iglesias. “Quarantine”, 2019. Máscara de porcelana cocida en caja refractaria con carbón a 1280°. 23 x 18 x 10 cm